Cómo limpiar una esponja filtrante de acuario

Limpiar una esponja debería ser la más fácil de las tareas, con pocas formas de hacerlo mal, pero no si es una esponja filtrante de acuario. A diferencia de una esponja que utilizarías para lavar el coche o limpiar los platos, cuando en el agua del acuario una esponja coloniza con bacterias beneficiosas que convierten los residuos tóxicos de los peces (amoníaco,) en sustancias menos dañinas.

Si una esponja es el único medio en su filtro es en realidad el sistema de soporte de vida para todo su acuario, por lo que si se limpia incorrectamente podría significar un desastre para su tanque.

No lavar bajo el grifo

Lo normal sería lavar la esponja filtrante marrón bajo el grifo, eliminando toda la suciedad hasta que vuelva a su color original. Este es uno de los errores más comunes en la piscicultura ya que el agua del grifo contiene cloro o cloramina que matan las bacterias. Si se hace esto, se perderán todas las bacterias beneficiosas, esterilizando la esponja y haciéndola incapaz de seguir convirtiendo el amoníaco. Los peces siguen creando amoníaco que se acumula y los mata. Un filtro sin bacterias se llama Síndrome del Tanque Nuevo, pero esto puede ocurrir también en tanques maduros si se lava la esponja bajo el grifo.

Utilice siempre agua de tanque vieja

Para combatir esto, todas las esponjas filtrantes deben limpiarse siempre en agua de tanque vieja. Combine todo su mantenimiento en uno, limpiando primero el cristal, luego aspirando la grava, y después limpiando la esponja en el agua sifonada en el cubo durante la aspiración. Por último, utilice el agua sucia para regar las plantas de la casa y del jardín, ya que está llena de nutrientes para ellas.

Cómo reemplazar una esponja

Pero con el tiempo una esponja puede empezar a desintegrarse, encogerse o no recuperar su forma adecuada al apretarla. Cuando esto sucede es el momento de una nueva esponja, pero ¿cómo hacerlo sin perder las bacterias? Si tu filtro sólo tiene una esponja, córtala por la mitad dejando la mitad de la vieja en su sitio y sustituyendo la otra mitad por una nueva. La esponja nueva tardará unas seis semanas en madurar, y después de ese tiempo podrá sustituir la segunda mitad por una nueva.

Si su filtro tiene dos esponjas, sustituya una a la vez, de nuevo en intervalos de seis semanas. Y si tiene el lujo de tener dos filtros, cambie la esponja de uno, dejando el otro de nuevo en unas seis semanas. Es una buena idea añadir bacterias filtrantes vivas al realizar cualquier mantenimiento del tanque, ya que inevitablemente se perderán algunas bacterias.

Y si quiere una alerta visual que le haga saber a tiempo si hay un problema, instale una Alerta de Amoníaco o un Seneye.

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