Las ballenas y los delfines son mamíferos, por lo que en muchos aspectos son iguales a los seres humanos. Entre otras cosas, tienen una estructura ósea similar, son de sangre caliente y dan a luz a «crías vivas». Las mayores diferencias entre estos animales y los seres humanos están relacionadas con nuestros respectivos entornos. Las ballenas y los delfines tienen un sistema respiratorio único que les permite pasar largos periodos de tiempo (a veces 30 minutos o más) bajo el agua, sin tomar oxígeno.
En tierra, los seres humanos y otros mamíferos respiran involuntariamente: Si no tomamos la decisión de respirar o no respirar, nuestro cuerpo tomará aire automáticamente. Debido a su entorno submarino, las ballenas y los delfines deben ser respiradores conscientes: Tienen que decidir activamente cuándo respirar. Por consiguiente, para poder respirar, tienen que ser conscientes. Esto presenta un problema, ya que los cerebros de los mamíferos necesitan entrar en un estado inconsciente de vez en cuando para funcionar correctamente (ver Cómo funciona el sueño para saber por qué puede ser esto).
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Hay mucho tiempo para que un delfín tome una siesta entre los viajes a la superficie del océano, por supuesto, pero esta no es una opción viable. Cuando eres un respirador consciente, simplemente no es factible estar completamente inconsciente — ¿qué pasa si no te despiertas a tiempo? La solución para las ballenas y los delfines es dejar dormir una mitad del cerebro cada vez. De esta manera, el animal nunca está completamente inconsciente, pero sigue teniendo el descanso que necesita.
Los científicos han estudiado este fenómeno en los delfines, utilizando la electroencefalografía. En este proceso, los electrodos conectados a la cabeza miden los niveles de electricidad en el cerebro. Los electroencefalogramas (EEG) resultantes de los cerebros de los delfines demuestran que, en el ciclo del sueño, la mitad del cerebro del delfín se «apaga» mientras la otra mitad sigue activa. Los investigadores han observado que los delfines están en este estado durante aproximadamente ocho horas al día.
No podemos saber realmente cómo es este estado de descanso, pero podemos hacer una buena conjetura. Probablemente sea algo parecido al estado de semiconsciencia que experimentamos cuando empezamos a quedarnos dormidos. Estamos bastante cerca de la inconsciencia, pero somos lo suficientemente conscientes de nuestro entorno como para despertarnos completamente si lo necesitamos.
¿Y dónde duermen los delfines y las ballenas? Probablemente podrían dormir en cualquier lugar, pero tiene sentido que lo hagan cerca de la superficie del océano para poder salir a respirar fácilmente. No es raro ver a los delfines «troncando», nadando lentamente a lo largo de la superficie, con muy poco movimiento. Presumiblemente, estos son delfines en reposo.
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