La fluoxetina es un inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina (ISRS) con eficacia demostrada en el tratamiento de episodios depresivos mayores. Desde 1985, se ha evaluado para el tratamiento del trastorno obsesivo-compulsivo (TOC). La corteza orbitofrontal y el núcleo caudado son estructuras cerebrales que se cree que están implicadas en la patogénesis del TOC, ya que la hiperactivación de estos territorios en el estado basal se corrige al remitir los síntomas inducidos por la terapia con un ISRS o por la psicoterapia conductual. Además, varios estudios han encontrado anomalías en la transmisión serotoninérgica en la corteza orbitofrontal y los ISRS pueden aumentar la liberación de serotonina al desensibilizar los autorreceptores 5HTID. El TOC es un trastorno psiquiátrico grave y crónico que frecuentemente se complica con episodios depresivos. Aquí se revisan los ensayos clínicos de fluoxetina que aparecen en las bases de datos informatizadas Medline y Embase. La fluoxetina resultó ser eficaz en el TOC en todos los estudios abiertos publicados, así como en los ensayos controlados con placebo, con un rango de dosis eficaz de 40 a 60 mg diarios. La evaluación clínica se realizó mediante escalas específicas como la Y-BOCS o la NIMH-OC y se observó una mejoría tras varias semanas de terapia. Estos estudios, que comprendían una fase prolongada, mostraron que la eficacia se mantenía -durante tres años en el estudio más largo-, dando lugar a un mayor porcentaje de respondedores en relación con la fase de inicio del tratamiento. Una comparación de la fluoxetina y la clomipramina mostró una eficacia comparable y un perfil de seguridad superior, tanto en términos de efectos secundarios anticolinérgicos como de cardiotoxicidad o sobredosis. La tasa de recaídas fue similar con ambos fármacos. En los cuatro meta-análisis que aparecen en las bases de datos, dos estudios encontraron una eficacia similar para la clomipramina y la fluoxetina. Hay pocos estudios que comparen directamente los diferentes ISRS, aparte de una comparación entre fluoxetina y sertralina que muestra que ambos fármacos tienen una eficacia similar. Con la clomipramina, los ISRS representan el tratamiento de primera línea recomendado por los expertos, en asociación con la terapia conductual para mejorar y mantener la respuesta clínica a largo plazo. Las directrices recomiendan una dosis óptima de fluoxetina de 40 a 60 mg diarios con una duración mínima del tratamiento de 1 a 2 años. La eficacia no debe evaluarse antes de 8 semanas para permitir el inicio de los efectos terapéuticos. La fluoxetina ha demostrado tener un buen perfil de seguridad en estos estudios y los efectos adversos descritos (insomnio, dolor de cabeza, disminución de la libido) rara vez han llevado a la interrupción del tratamiento. Los efectos adversos como el nerviosismo o el insomnio al inicio del tratamiento fueron predictores de una buena respuesta a la fluoxetina, al igual que la presencia de remisiones, la ausencia de tratamiento farmacológico previo y una puntuación alta de impulsividad. Una larga historia del trastorno, la gravedad de los síntomas, las obsesiones de recogida, las compulsiones de lavado, la lentitud obsesiva y la comorbilidad con una personalidad esquizotípica o tics vocales o motores se asociaron a una peor respuesta. La fluoxetina también alivia los síntomas depresivos colaterales reduciendo significativamente la ideación suicida y la impulsividad en los pacientes con TOC. Nuestro estudio indica que la fluoxetina es eficaz y bien tolerada en el TOC, lo que la sitúa entre los tratamientos de primera línea recomendados por las directrices de las conferencias de consenso.