Acerca del tratamiento del dolor
¿Qué es el tratamiento del dolor?
El tratamiento del dolor es una rama de la medicina especializada que también se conoce como medicina del dolor. Se utiliza para reducir el impacto del dolor, ya sea de origen quirúrgico o crónico.
¿Quién necesita el tratamiento del dolor?
El dolor de origen quirúrgico o de origen crónico puede ser difícil de controlar. El dolor crónico puede ser incluso imposible de curar. El tratamiento mediante el control del dolor puede ayudar a reducir el dolor, lo que conduce a una mejor calidad de vida.
Cuando el dolor es recurrente después de una intervención quirúrgica, un cáncer o un tratamiento contra el cáncer, el control del dolor puede ser beneficioso. Los pacientes también pueden beneficiarse del tratamiento del dolor cuando se trata de migrañas, afecciones neuropáticas o lesiones como el latigazo cervical.
Practicantes del tratamiento del dolor
Los que practican el tratamiento del dolor tienden a proceder de diferentes campos de la medicina, con antecedentes que varían en diversas especialidades. Tanto si tienen formación en medicina física, rehabilitación, neurología, anestesiología o psiquiatría, quienes practican el tratamiento del dolor trabajan con una variedad de profesionales sanitarios, como psicólogos o fisioterapeutas, para adaptar el plan de cada paciente a sus necesidades individuales.
Tipos de tratamiento
Pueden utilizarse diversos enfoques para tratar el dolor crónico. Su profesional del tratamiento del dolor puede elaborar un plan que incluya fisioterapia, inyecciones, tratamientos psicológicos, así como ejercicio y cambios en el estilo de vida. Es importante que usted, como paciente, desempeñe un papel activo en su tratamiento, proporcionando información. De este modo, su profesional del tratamiento del dolor puede garantizar que su tratamiento sea lo más eficaz posible.
La vida con el dolor crónico
Si bien es posible que algunas formas de dolor crónico nunca se alivien por completo, el uso de la terapia de control del dolor puede ayudar a reducir el dolor de forma significativa. Se pueden utilizar estrategias de afrontamiento para mantener el dolor tolerable. Esto puede aportar cierto alivio a quienes se enfrentan al día a día con el dolor crónico.