Shiloh

Al comenzar la historia, Norma Jean Moffitt está ejercitando sus músculos pectorales. Leroy Moffitt, el marido de Norma Jean, se lesionó hace cuatro meses mientras conducía su camión. No querría volver a conducir un camión aunque pudiera. Para pasar el tiempo, construye artesanías y sueña con construir una cabaña de madera. Norma Jean se mantiene a sí misma y a su marido trabajando en una farmacia Rexall en el departamento de cosméticos.

Leroy está contento de estar en casa y se siente afectuoso con su mujer, pero le preocupa que ella no corresponda a estos sentimientos. Ella no parece alegrarse por su constante presencia. Se pregunta si tenerlo cerca le recuerda a Randy, su hijo, que murió siendo un bebé. Leroy se da cuenta de que la muerte de un hijo separa a muchas parejas, y se siente afortunado de que su matrimonio esté intacto.

Una noche, Leroy compra marihuana a Stevie Hamilton, el hijo de un antiguo compañero de colegio de Leroy. El padre de Stevie es un médico acomodado. Leroy intenta conversar sobre sus planes de construir una cabaña de madera, pero Stevie no está interesado. Nos enteramos de que Leroy y Norma Jean, que ahora tienen treinta y cuatro años, se casaron cuando tenían dieciocho y tuvieron a Randy unos meses después. Mientras la familia estaba en un autocine viendo Dr. Strangelove, Randy murió de SIDS (Síndrome de Muerte Súbita del Lactante). Tenía cuatro meses y tres días.

Cuando Leroy vuelve a casa, su suegra, Mabel Beasley, está en la casa. Ella vigila el estado de la ropa y las plantas de Norma Jean. Les regala a Norma Jean y a Leroy un volante que ha hecho en el taller de tapicería donde trabaja. Leroy bromea diciendo que pueden usarlo para esconder cosas. Mabel sigue resentida por haber dejado embarazada a Norma Jean.

Mabel se burla de la funda de almohada de punto de aguja de Star Trek de Leroy, llamando a la costura un pasatiempo de mujeres. Leroy afirma que los jugadores de fútbol cosen y luego explica sus planes de construir una cabaña. Norma Jean dice que lo primero que tiene que hacer es conseguir un trabajo. Mabel les insta a hacer un viaje a Shiloh, el campo de batalla de la Guerra Civil al que ella y su difunto marido, que murió cuando Norma Jean era una niña, fueron en su luna de miel.

Cuando Mabel se va, Norma Jean le presenta a Leroy una lista de posibles trabajos, entre los que se incluyen el de vigilante, carpintero y trabajador en un aserradero. Él dice que no puede estar de pie todo el día, y ella le recuerda que ella hace exactamente eso en Rexall’s. Mientras habla, hace ejercicios de piernas. Leroy reitera su deseo de construir una cabaña, pero Norma Jean dice que no quiere vivir en una. Norma Jean y Leroy solían divertirse cuando él volvía del trabajo, comiendo la comida que Norma Jean preparaba, jugando a las cartas y viendo la televisión. Ahora Norma Jean come cereales saludables. Este es uno de los muchos pequeños detalles que Leroy ha aprendido sobre su mujer ahora que está en casa.

Leroy sale a dar paseos en coche sin sentido y a mirar las nuevas subdivisiones. Después de una de estas excursiones, llega a casa y encuentra a Norma Jean haciendo una cacerola y llorando porque Mabel la encontró fumando. Leroy la consuela. Mientras él fuma un porro, ella toca «Sunshine Superman» y «Who’ll Be the Next in Line?» en el órgano que le regaló para Navidad. Piensa en un viejo amigo, Virgil, que organizó una redada de drogas. De nuevo menciona la cabaña, y de nuevo Norma Jean descarta la idea. Anhela volver a conocer a su mujer, pero no dice nada.

El sábado, Mabel se acerca y cuenta una historia sobre un perro salchicha que mató a un bebé, alegando que la madre era negligente. Leroy le advierte a Mabel que tenga cuidado con lo que dice. Después, Norma Jean dice que la historia era para castigarla por fumar. Ella y Leroy piensan en Randy, pero ninguno de los dos dice su nombre.

Norma Jean se inscribe en una clase de composición en la escuela nocturna. Leroy está a la defensiva sobre su propio inglés. Empieza a cocinar comidas más exóticas. En lugar de tocar su órgano, escribe un trabajo sobre música. Leroy sabe que ella lo dejará. Él y Mabel se compadecen del cambio de Norma Jean, y Mabel vuelve a sugerir un viaje a Shiloh. Cuando Norma Jean llega a casa, es grosera con su madre. Esa noche, le dice a Leroy que su nombre significa el rey.

El domingo van a Shiloh. Parece un parque, no un campo de golf, como imaginaba Leroy. Ven una cabaña de madera. Cerca del cementerio, comen un picnic. Leroy se siente nervioso cerca de su esposa, como si ella fuera una mujer mayor y él un niño torpe. Después de comer, Leroy se fuma un porro. Se hace el silencio y Norma Jean dice que quiere dejar a Leroy. Él sugiere volver a empezar, y ella dice que ya han vuelto a empezar. Él le pregunta si es una cuestión de «liberación femenina». Norma dice que algo cambió cuando Mabel la pilló fumando. Dice que se siente como si tuviera dieciocho años, cosa que odia. Se aleja.

Leroy sigue fumando y piensa en la guerra y en la forma en que se relaciona con el matrimonio de Mabel y con el suyo y el de Norma Jean. Se da cuenta de que ha dejado un espacio en medio de esta historia, al igual que hay un espacio en medio de una cabaña de madera, y un espacio en medio de su matrimonio. Se da cuenta de que construir una cabaña de madera fue una idea terrible. Comienza a seguir a Norma Jean, a quien ve caminar hacia el río Tennessee. En el acantilado, ella mira a Leroy y mueve los brazos en lo que podría ser un gesto hacia él o un ejercicio para sus músculos pectorales. El cielo le recuerda a Leroy el volante de polvo que les regaló Mabel.

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