Cada día, innumerables estadounidenses consumen cigarrillos u otros productos con nicotina. El Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. estima que entre el 80 y el 90 por ciento de los fumadores habituales de cigarrillos son adictos a la nicotina.
Muchas personas adictas a la nicotina quieren dejarlo, pero no pueden. Cuando dejan de consumir tabaco repentinamente, se producen una serie de angustiosos síntomas de abstinencia. Estos efectos no duran para siempre, pero las personas que sufren los síntomas suelen volver a consumir nicotina para hacerlos desaparecer.
Síntomas del síndrome de abstinencia de la nicotina
Dejar la nicotina de golpe no es la única forma de experimentar el síndrome de abstinencia. Reducir el consumo de tabaco o cambiar el tipo de tabaco también puede inducir síntomas de abstinencia. Por ejemplo, el cambio de cigarrillos normales a cigarrillos con poca nicotina puede producir estos efectos.
Los síntomas comunes de abstinencia de la nicotina incluyen:
- Dolor de cabeza
- Dolor de garganta
- Antojos intensos
- Náuseas y calambres abdominales
- Estreñimiento
- Sentimientos depresivos
- Ritmo cardíaco lento
- Hambre
- Inquietud
- Problemas de pensamiento
- Insomnio
Los antojos son un signo revelador de la abstinencia de nicotina, y pueden aparecer sin previo aviso. Cuando se fuma, se activan los receptores de nicotina en el cerebro. Estos receptores hacen que se desee seguir fumando. Cuando se ignoran estos deseos, pueden producirse antojos y otros síntomas de abstinencia.
Las personas suelen experimentar antojos cuando se les recuerda su consumo de tabaco en el pasado. Pasar tiempo con un amigo que fuma o ir a un restaurante donde se permite fumar puede desencadenar las ansias. Pero si cede a estos impulsos, su adicción a la nicotina continuará.
Tiempo de abstinencia de la nicotina
Las personas que consumen tabaco con regularidad tienen un mayor riesgo de experimentar los dolorosos efectos de la abstinencia. Los síntomas de abstinencia de la nicotina más angustiosos duran entre unos días y un par de semanas.
Algunas personas hacen todo lo posible para aliviar estos efectos. Las personas que experimentan síntomas de abstinencia de la nicotina suelen volver a consumir productos del tabaco durante la primera semana de abstinencia, según el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos.
Los síntomas de abstinencia acaban desapareciendo. Sin embargo, la nicotina puede permanecer en el organismo mucho tiempo después de haber consumido tabaco por última vez. El tiempo que tarda en salir del organismo depende de una serie de factores, entre los que se incluye su historial de consumo de nicotina.
Cómo controlar los síntomas de abstinencia de la nicotina
La abstinencia de la nicotina no pone en peligro la vida, pero puede resultar incómoda. Antes de empezar a abstenerse del tabaco, hable con su médico. Éste puede darle consejos para dejar el tabaco o recetarle medicamentos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para el tratamiento de la adicción a la nicotina.
El médico puede recomendar un tratamiento de sustitución de la nicotina, que ayuda a las personas a dejar los productos del tabaco. Estas opciones de tratamiento incluyen chicles, parches, pastillas, inhaladores y aerosoles nasales que proporcionan pequeñas cantidades de nicotina al organismo.
Reducir gradualmente la dosis de nicotina que se consume a lo largo del tiempo puede ayudar a disminuir la dependencia de la droga al tiempo que se evitan los síntomas de abstinencia.
Los grupos de apoyo también pueden ayudar. Nicotine Anonymous es un popular programa de autoayuda cuyo objetivo es ayudar a las personas a superar la adicción a la nicotina. Con unos 550 programas en todo el mundo, este programa de 12 pasos está formado por una comunidad de personas que se apoyan mutuamente en su camino para superar el consumo de nicotina.
Si tiene síntomas de abstinencia de la nicotina, busque formas de distraerse de los efectos angustiosos. Puede mantenerse activo practicando deportes o pasando tiempo con la familia. Descansar mucho también es una forma eficaz de controlar los síntomas difíciles.
Algunos días serán más difíciles que otros. Pero es importante recordar los beneficios de una vida sin tabaco.