Conocido formalmente como McMillin Memorial Mausoleum, Afterglow Vista es el lugar de descanso final de la familia de un magnate de los minerales, enterrado entre una estructura simbólica que parece sacada de una novela de fantasía.
John S. McMillin fue propietario de una exitosa fábrica de cal de Washington durante su vida, además de ser un acérrimo metodista y masón activo. Así, cuando construyó el épico mausoleo que albergaría sus restos y los de su familia, reunió todos sus intereses para concebir Afterglow Vista, nombre que en realidad está colocado en el arco de piedra que conduce al lugar de enterramiento.
El llamado «mausoleo» es en realidad una rotonda al aire libre con una enorme mesa de piedra caliza en el centro. Alrededor de la mesa hay gruesas sillas de piedra que no sólo representan a los miembros de la familia McMillin, sino que en realidad contienen sus cenizas y actúan como lápidas. Esto pretendía representar la mesa familiar en la que se reunían los McMillin. Parece que hay un espacio vacío en la mesa y se dice que esto representaba al hijo de los McMillin que se apartó del metodismo. La mesa está rodeada por seis columnas romanas y una única columna rota que se dice que representa la naturaleza inacabada de la vida del hombre.
Las columnas iban a sostener originalmente una cúpula de latón sobre la mesa, pero al final la familia optó por dejar el lugar expuesto a los elementos. Incluso los escalones que conducen al monumento fueron numerados con significado masónico para representar las etapas de la vida.
Esta significativa y cargada declaración sobre la muerte y la familia está abierta al público, aunque quien desee rodar una epopeya de espadas y brujería puede necesitar un permiso.