¿Te gusto? Bueno, debería. Además, si eres un bloguero, deberías tener una página de Facebook: es una forma estupenda de hacer llegar tu contenido a un público más amplio y de relacionarte con gente nueva.
Para aquellos que no me siguen en Facebook, se están perdiendo las Yodas rellenas, las tazas de café al azar, el ocasional homenaje a mi perro y una lista de enlaces que comparto a lo largo de la semana.
¿Te gusto? Si es así, haz clic aquí y únete al resto de los chicos guays.
Si ya lo hiciste hace años y te preocupa que este post haya sido una pérdida de tiempo, no te preocupes.
Deberías considerar la posibilidad de tener una página separada para tu blog en Facebook, aparte de tu perfil personal para que yo (y otros) pueda «gustarte» de nuevo.
Aquí tienes tres razones por las que:
El límite de 5000 amigos
Facebook limita los perfiles personales a 5000 amigos, así que si (quiero decir cuando) tu blog se hace enorme y tienes más de 4999 fans, eventualmente necesitarás una página en Facebook.
También podrías ser preventivo y empezar ahora.
Tu blog no eres tú
Si tienes un blog, entonces deberías darte cuenta de que no eres un ordenador. Tu blog no eres tú. Tampoco lo es tu negocio.
Es imposible, por mucho que lo intentes, meter todos los matices y la idiosincrasia tuya en un montón de píxeles o de copias.
Sin olvidar que tu blog puede atraer a personas que no son tus amigos y que nunca lo serían en la vida real. No pasa nada. Dales una página donde puedan congregarse en torno al «tú» online.
Compartir contenidos
Más de la mitad de los contenidos que se comparten en Internet lo hacen a través de Facebook. De hecho, la principal fuente de tráfico de este blog proviene de personas que comparten mis contenidos en Facebook.
Si tienes una página de Facebook, puedes compartir tus contenidos con tu audiencia y animarles a que los compartan con sus propios amigos. Me doy cuenta de que incluso cuando sólo unas pocas personas comparten uno de mis posts en Facebook que puede conducir fácilmente a unos pocos cientos de visitantes – sólo desde Facebook.
Tener una página le permite crecer una audiencia mucho más grande que su propia red personal permitiría, y como sus lectores comparten su contenido, su contenido irá más viral a través de Facebook.
Dar a tu blog una presencia más permanente en Facebook no hace más que facilitar esto.
Si no tienes una página de Facebook para tu blog (¡es gratis!), deberías considerar conseguir una. Para empezar, haz clic aquí. También, Copyblogger tiene una gran guía para los vendedores y los bloggers para el uso de Facebook.
(Oh sí, y no se olvide de como mi blog en Facebook.)