La persecución de la cola se observa con frecuencia en gatitos y gatos jóvenes. Desde una edad muy temprana, los gatitos exploran su nuevo mundo y practican sus habilidades de caza. También participan activamente en el juego y con frecuencia persiguen y saltan sobre objetos en movimiento, incluso si se trata de la punta de una cola que se mueve, ¡incluso la suya propia! Sin embargo, la persecución de la cola en los gatos mayores es un comportamiento poco común y anormal. Aunque parezca que su gato se está divirtiendo, este comportamiento podría indicar un problema más grave. Si nota que su gato se persigue la cola con regularidad, debería ponerse en contacto con su veterinario.
Hay varias razones médicas por las que su gato podría tener este comportamiento tan extraño, entre ellas: lesiones en la cola, dolor, alergias cutáneas o alimentarias, glándulas anales afectadas, gusanos o pulgas. Si el veterinario descarta la existencia de problemas médicos, podría indicar que su gato se persigue la cola por razones de comportamiento. Estos pueden ser el aburrimiento, el estrés y el comportamiento compulsivo. La persecución de la cola es un comportamiento compulsivo poco común pero reconocido. Las motivaciones que subyacen a este tipo de problema son el estrés, la frustración y el conflicto motivacional; las tres pueden subyacer al comportamiento al mismo tiempo o en diferentes ocasiones. Las situaciones de conflicto y ansiedad en las que el gato se excita mucho pueden llevar a comportamientos de desplazamiento como perseguirse la cola o acicalarse en exceso.
Es muy importante que, si sorprende a su gato persiguiéndose la cola, no reaccione de ninguna manera, ya que de lo contrario reforzará inadvertidamente este comportamiento problemático. Por favor, no le preste atención ni le dé comida para intentar detener este comportamiento, ni haga nada que pueda estresarle, como gritarle. Cualquier intento de detener el comportamiento puede aumentar la ansiedad y el conflicto y agravar aún más el problema.
Es muy importante que proporcione a su gato un entorno y una rutina predecibles, y que le proporcione enriquecimiento y estimulación adicionales con la esperanza de romper estos patrones de comportamiento negativos. La introducción de sesiones diarias de juego interactivo y de comederos de rompecabezas en su rutina debería darles cosas alternativas y más apropiadas en las que centrar su atención.
Si el problema continúa, le aconsejaría que pidiera a su veterinario que le remitiera a un conductista felino cualificado. Por favor, consulte: The Animal Behaviour and Training Council (ABTC) www. abtcouncil.org.uk o The Association of Pet Behaviour Counsellors (APBC) www. apbc.org.uk para obtener una lista de profesionales cualificados.