Es una conversación común estos días: Una persona dice: «Las vidas de los negros importan». Entonces otra responde: «No, todas las vidas importan»
También es un completo malentendido de lo que significa la frase «las vidas negras importan». La persona que recibe la frase la interpreta como «las vidas de los negros importan más que cualquier otra vida»
Pero el objetivo de Black Lives Matter no es sugerir que las vidas de los negros deberían ser o son más importantes que todas las demás vidas. Por el contrario, simplemente señala que las vidas de los negros están relativamente infravaloradas en Estados Unidos -y tienen más probabilidades de que la policía acabe con ellas- y que el país debe reconocer esa desigualdad para ponerle fin.
Para ello, una mejor manera de entender Black Lives Matter es considerar su frase motriz como «las vidas de los negros también importan». Así que todas las vidas importan, obviamente, pero es un subconjunto de vidas en particular el que actualmente está infravalorado en Estados Unidos.
Pero si eso no es suficiente, aquí hay otras nueve formas en que la respuesta «todas las vidas importan» ha sido rebatida.
1) «Todas las casas importan»
2) La explicación de un usuario de Reddit
Comentario ELI5: ¿Por qué es tan polémico que alguien diga «Todas las vidas importan» en lugar de «Las vidas negras importan»?
4) «También hay otras enfermedades»
6) La explicación de un ministro unitario universalista a un miembro de la iglesia
Tomada de la página web de la Asociación Unitaria Universalista:
Por supuesto que todas las vidas importan. La afirmación del valor inherente y la dignidad de cada persona es fundamental para el Universalismo Unitario. Lamentablemente, nuestra sociedad tiene una larga historia de tratar a algunas personas como menos valiosas que otras. Un estudio tras otro ha confirmado que, en situaciones equivalentes, los afroamericanos y los latinos son tratados con fuerza letal con mucha más frecuencia que los blancos, y las autoridades rinden menos cuentas. Desgraciadamente, los prejuicios raciales siguen existiendo incluso cuando ya no son conscientes; esto también lo confirman múltiples estudios. La falta de responsabilidad en el uso de la fuerza combinada con el prejuicio inconsciente es con demasiada frecuencia una combinación mortal – y una que podría poner a los agentes de policía, así como al público, en gran peligro.
Decir que las vidas de los negros importan no es decir que las demás vidas no importan; de hecho, es todo lo contrario: es reconocer que todas las vidas importan, y reconocer que los afroamericanos son a menudo objeto de ataques injustos (es testigo del número de afroamericanos abordados diariamente sin otra razón que caminar por un barrio blanco -incluyendo algunos, como el joven Trayvon Martin, que perdieron la vida-) y que nuestra sociedad aún no está tan avanzada como para haberse vuelto verdaderamente daltónica. Esto significa que muchas personas de buena voluntad se enfrentan a la dura tarea de reconocer que estos males sociales siguen existiendo, y que el privilegio de los blancos sigue existiendo, aunque deseemos que no sea así y no lo hayamos pedido. Desde luego, estoy de acuerdo en que ningún Dios amoroso juzgaría a nadie por el color de la piel.
Como hombre blanco, nunca me ha seguido la seguridad en unos grandes almacenes, ni me ha parado la policía por conducir por un barrio en el que no vivía. Mis amigos afroamericanos han tenido, casi en su totalidad, estas experiencias. Algunos han pasado por incidentes mucho peores. Debo al ideal que compartimos, el ideal de que todas las vidas importan, tomar en serio sus experiencias y escuchar lo que dicen. Negar la verdad de estas experiencias porque me hacen sentir incómodo sería poner mi comodidad por encima de la seguridad de los demás, y no puedo hacerlo.
Le agradezco mucho que me escriba, y me alegro de que compartamos el objetivo de llegar a un día en el que las personas no sean juzgadas, consciente o inconscientemente, por su raza. Yo también creo que ese día es posible, pero que hará falta mucho trabajo para llegar a él. Ese trabajo empieza por escucharnos unos a otros, y por escuchar especialmente las voces de los que tienen menos poder en la sociedad. Si no hay nada más claro en las últimas semanas, es dolorosamente evidente que un gran número de personas no creen que sean tratadas con justicia. La curación comienza escuchando esas voces e historias.
8) La respuesta de un profesor de derecho a un estudiante
Tomada de la carta mucho más larga del profesor de derecho al estudiante:
Mira: Por qué grabar a la policía es tan importante
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