A tres millas de la costa de Key Biscayne, en Florida, existe una de las creaciones más extrañas. Un mausoleo submarino, conocido como The Neptune Memorial Reef, Atlantis Reef Project o el Arrecife Atlantis fue inaugurado en 2007 por los diseños del artista Kim Brandell.
Estatua del león. Photo Credit
El proyecto fue concebido por Gary Levine, que quería crear un columbario submarino para los restos incinerados. Según los planos, el mayor arrecife artificial debía cubrir un área de 600.000 pies cuadrados a una profundidad de 40 pies. Pero, debido a varias razones, el proyecto aún no se ha completado y hasta ahora sólo se ha realizado una parte de la idea original.
Arrecife conmemorativo. Photo Credit
En 2012, el Arrecife Conmemorativo de Neptuno se extendía por un área de media hectárea, con planes de expandirse a 16 acres. Los diseños de la ciudad submarina incluyen carreteras subacuáticas que conducirán a la zona central del arrecife, enriquecida con bancos y estatuas. Los constructores del arrecife se enfrentaron a varias dificultades, como los permisos de construcción y el control de calidad. Una vez concedidos los permisos, el arrecife debía cumplir el requisito de ser capaz de soportar la tormenta más fuerte que se produzca cada 100 años. Hasta entonces, se trataba de un huracán de categoría 4.
Desgraciadamente, durante la construcción del mausoleo, un huracán de categoría 5 llamado Andrew arrasó Florida, lo que obligó a replantear todo el proyecto. Según los planos, el lugar estaba calculado para albergar 850 restos, con el objetivo de ampliarlo a más de 125.000.
El arrecife Neptune Memorial. Photo Credit
Actualmente, todos los trabajos de construcción en el arrecife se han detenido y el arrecife se ha cubierto de coral, convirtiéndose oficialmente en un arrecife de coral. Con todos los moldes destruidos, el futuro del proyecto es ahora incierto. Sin embargo, se comercializa como sitio para buceadores, pero la pesca y la caza de langostas están prohibidas. La zona se asemeja ahora a la largamente perdida ciudad de la Atlántida, con arcos, puertas, columnas y estatuas con forma de animales repartidas por todo el lugar.
Plaque.Photo Credit
Los que deseen visitar a sus seres queridos son bienvenidos a bucear y a quedarse todo el tiempo que quieran. Los costes de un entierro en el arrecife son de 2.600 dólares para una colocación estándar de los restos incinerados y de 4.000 dólares para un paquete de cremación y colocación. Entre los que eligieron el arrecife como destino final se encuentra Julia Child, la famosa chef de la televisión, fallecida en 2004.
Escalera bajo el agua. Photo Credit
Los creadores del arrecife definen el lugar como un ecosistema único, de rápido desarrollo, en el que viven 58 especies de peces. Su idea es crear un hábitat marino, y afirman que cada ángulo del arrecife está diseñado y revisado por biólogos marinos.
Memorial de Neptuno. Photo Credit
El número de las especies de coral ha aumentado en tan solo un año, con 14 especies descubiertas en 2012, frente a las 9 que ya se sabía que vivían en la zona. Las langostas, el pez loro arco iris, las morenas verdes y el erizo se encuentran entre la fauna que reside aquí.
Estrella de cemento con placa. Photo Credit
La zona fue especialmente diseñada para dar paso libre a los habitantes, pero bloquear el camino a los depredadores.
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Aunque parezca una locura, la idea del arrecife es realmente fantástica. Aquí, los restos de los seres queridos pasan a formar parte de algo vivo y en crecimiento, por lo que el lema del arrecife, que es «Crear vida después de la vida», está plenamente justificado. Se pueden elegir varias ubicaciones para los restos, y algunas familias ya compran columnas de arrecife enteras para poder enterrarlas juntas.