Mike Tyson es casi tan famoso por su vida personal como por sus logros deportivos.
Este fin de semana el excampeón del mundo volverá al ring de boxeo por primera vez en 15 años cuando se enfrente a Roy Jones Jr en California.
Tyson, que en su día fue apodado «el hombre más malo del planeta», ha experimentado una enorme transformación en los últimos años, entrenando duro en el gimnasio y manteniendo su vida en el buen camino.
Y atribuye a una mujer el mérito de haberle ayudado a vencer sus adicciones y haberle devuelto al buen camino, su querida esposa, Lakiha Spicer.
Tyson dijo: «Sin mi mujer, soy un animal salvaje… Miro a las mujeres de forma diferente a medida que envejezco. Estoy muy contento de que mi mujer y yo nos hayamos juntado, porque no sé cómo habría sobrevivido ahí fuera».
La pareja se había conocido cuando Lakiha tenía sólo 18 años, pero no empezaron a salir hasta poco antes de casarse en 2009.
Sin embargo, Lakiha fue encarcelada durante seis meses en 2008 por defraudar a la empresa de su padre y estaba embarazada de su futuro marido cuando fue enviada a prisión.
Cuando fue puesta en libertad, descubrió que su futuro marido había consumido drogas como forma de sobrellevar la situación y él le ha atribuido el mérito de haberle ayudado a superar sus adicciones.
La pareja tiene ahora dos hijos, Milan, de 12 años, y su hijo, Marruecos, de nueve.
El combate de Tyson del sábado será la primera vez que Lakiha vea a su marido en acción en un ring de boxeo.
Antes de casarse con Lakhia, Tyson había estado casado dos veces antes – primero con la actriz Robin Givens y la doctora Monica Turner.
Tyson y Givens se casaron en 1988, pero su matrimonio fue tumultuoso y sólo duró 12 meses.
Hubo rumores de violencia y abuso doméstico y, en una entrevista explosiva, con su marido sentado a su lado, Givens describió la vida con el boxeador como «una tortura, un puro infierno, peor que cualquier cosa que pudiera imaginar».
Afirmó que su marido era un maníaco depresivo y, sólo un mes después, solicitó el divorcio.
El propio Tyson admite que dilapidó su enorme fortuna cuando aún estaba en la cima de su carrera y se ha descrito a sí mismo como «un animal con el dinero».
Tras la ruptura de su matrimonio con Givens, Tyson afirmó que la había pillado en la cama con el actor de Hollywood, Brad Pitt.
La pareja se había separado pero el boxeador seguía visitando a su ex en su casa casi a diario,
Afirma que fue en una de estas visitas cuando pilló a Brad Pitt en su cama.
Tyson dijo: «Estaba muy enfadado. Iba a… deberías haber visto su cara cuando me vio».
Después escribió en su autobiografía: «Parecía que estaba listo para recibir la extremaunción»
A pesar de su agrio divorcio con la actriz Givens, Tyson se casó por segunda vez, con la pediatra Monica Turner.
La pareja se casó en 1997 en una discreta ceremonia tras conocerse siete años antes en una fiesta organizada por el actor Eddie Murphy.
Mónica, una doctora que trabajaba en Washington, llegó a visitar a Tyson cada dos semanas cuando éste estaba encarcelado por violación.
Habían esperado vivir una vida tranquila en su casa de Maryland, pero sólo cuatro años después, Mónica solicitó el divorcio, alegando adulterio.
Tienen dos hijos, Rayna y Amir.
Después de 11 años de matrimonio, Tyson parece haber encontrado por fin a su alma gemela.
Dijo: «Por eso me casé tres veces, porque no puedo vivir sin una esposa. Si no tengo una esposa, me suicidaré. Eso es hablar de verdad. Necesito a alguien que me escuche. Soy un soldado. No puedo pensar por mí mismo, necesito a alguien que lo haga… Me conozco.
«Y en esta etapa de mi vida, ellos son mis maestros. Si un hombre no tiene un poco de miedo a su mujer, no está viviendo bien su vida»
Lahika está entregada a su megaestrella marido.
Dijo: «Nunca pude sacarlo de mi sistema. Lo intentaba y luego volvíamos a estar juntos. Es la única persona de la que pude volver a enamorarme varias veces.
«Normalmente, cuando termino con alguien lo supero. Pensaba que lo había sacado de mi sistema y entonces empezábamos a hablar de nuevo y se encendía de nuevo.»