La historia del ojo

Cómo entra la luz en el ojo

Es importante que entre la cantidad correcta de luz en el ojo. Si entra demasiada luz en el ojo pueden producirse daños en la retina. Sin embargo, si entra muy poca luz en el ojo, se dificulta la visión.

Para regular los niveles de luz que entran en el ojo, el tamaño de la pupila se ajusta mediante el iris. Los pequeños músculos que componen el iris, conocidos como músculos circulares y radiales, se relajan y se contraen para mantener un nivel bastante constante de luz que entra en el ojo.

Con la luz brillante, los músculos circulares se contraen mientras que los radiales se relajan. Esto hace que la pupila se contraiga y entre menos luz en el ojo. En condiciones de poca luz ocurre lo contrario. Los músculos circulares se relajan y los radiales se contraen, lo que hace que la pupila se dilate y permita que entre más luz en el ojo.

Cómo enfocamos

Aunque la córnea realiza la mayor parte del enfoque, no puede variar el grado de refracción de la luz. A diferencia de la córnea, el cristalino tiene la capacidad de cambiar de forma y, por tanto, de modificar el grado en que refracta la luz. Para que podamos enfocar tanto los objetos cercanos como los lejanos, el cristalino ajusta el enfoque para que se forme una imagen clara en la retina.

Para ver con claridad un objeto que está lejos de nosotros, los músculos ciliares se relajan. Esto hace que las fibras zonulares que conectan el cristalino con los músculos ciliares se estiren y, como consecuencia, el cristalino se aplana.

Lo contrario ocurre cuando se enfoca un objeto que está cerca de nosotros. Los músculos ciliares se contraen, lo que disminuye la tensión de las fibras zonulares de conexión y hace que el cristalino adquiera una forma más convexa y redonda.

Color del ojo

El iris, la parte coloreada del ojo, varía de color de una persona a otra. Estas diferencias de color vienen determinadas por la cantidad de melanina presente en el iris. La melanina es un tipo de pigmento insoluble presente en todos los tipos de vida animal.

En general, cuanto más oscuro es el color de los ojos, más melanina está presente en el iris. Los ojos marrones oscuros son los que tienen más melanina, mientras que los azules son los que tienen menos. La melanina desempeña un papel vital en la protección contra el sol, de ahí que los ojos de color más pálido sólo hayan evolucionado en climas más fríos.

Hay algunas personas que tienen los ojos de distinto color. El término médico para esta condición es heterocromía iridiana, es bastante rara en los seres humanos y se cree que es el resultado de una alteración de uno de los genes que domina el color de los ojos.

Cómo se mantiene limpio el ojo

El ojo tiene varios mecanismos que utiliza para mantenerse limpio, sano y en buen estado de funcionamiento:

  • Parpadeo: la acción de abrir y cerrar los párpados ayuda a mantener el ojo limpio y lubricado. Se calcula que una persona media parpadea doce veces por minuto.
  • Producción de lágrimas: las lágrimas son producidas por la glándula lagrimal y son el líquido limpiador básico del ojo. Limpian el ojo de cuerpos extraños y contienen enzimas que ayudan a proteger los ojos del ataque bacteriano.
  • La conjuntiva – una fina capa que cubre el exterior del globo ocular en la parte delantera del ojo forma una barrera natural contra los peligros externos, incluyendo el humo, las bacterias, los alérgenos, así como los efectos potencialmente dañinos del sol y el viento.

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