Guatemala se asienta dentro del denominado «Cinturon de Fuego» del Pacífico, una zona de gran actividad sísmica y volcánica, donde se registran miles de temblores al año y en la que hay unos 288 volcanes activos.
César Armando Pérez Marroquín
17 de diciembre de 2019 a las 05:00h
La cantidad de esas formaciones, junto a las cuatro fallas tectónicas, convierten a este país en una zona sísmica. La mayoría de los volcanes en Guatemala están colocados sobre la Sierra Madre, en las cercanías del océano Pacífico.
De esa cuenta que el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) hizo un ranquin para medir el grado de peligrosidad que representan 25 de los 34 volcanes que hay en el país, pues en sus alrededores podrían vivir más de cuatro millones de personas, quienes se constituyen en potenciales víctimas ante una erupción de gran magnitud.
El Santiaguito, entre Quetzaltenango y Retalhuleu, es el que encabeza la lista, según Amílcar Roca, coordinador del Área de Vulcanología del Insivumeh, quien dijo que los volcanes están constituidos en cinco categorías del ranquin, muy alta, alta, media, baja, muy baja.
Agregó que en la categoría de muy alta quedaron los volcanes más activos o en constante erupción: de Fuego, Pacaya y Santiaguito, siendo el último el que encabeza el ranquin como el más peligroso.
También lea: Volcán de Fuego continúa en actividad y lanza ceniza sobre comunidades cercanas
«En cuanto a la amenaza volcánica se estudió qué índice de explosividad tienen registrados estos volcanes para saber qué tipo de erupción esperamos, y por eso es que el Santiaguito salió en el primero lugar, porque de este esperamos la explosión más fuerte que podríamos tener comparado con los demás volcanes», dijo Roca.
Añadió que el objetivo es dar a conocer qué tipo de «vecino volcánico» tienen las comunidades, planificar y saber qué volcán se debe investigar; además, con el ranquin se promueve la planificación institucional, tomando como base que no puede saber cuál es el próximo volcán en hacer erupción.
la Redacción / Quetzaltenango
15 de abril de 2016 a las 10:14h
El experto añadió que hay diferentes amenazas volcánicas y que los parámetros de exposición dependen de qué tan cerca se encuentran las poblaciones a los colosos. La amenaza más común es la caída de ceniza, pues esta puede viajar a varios kilómetros de distancia.
El volcán de Fuego, de tres mil 763 metros de altura y ubicado entre Chimaltenango, Sacatepéquez y Escuintla, registró el 3 de junio del 2018 una potente erupción que provocó una avalancha de gases, ceniza y rocas ardientes que arrasó la comunidad de San Miguel Los Lotes, El Rodeo, Escuintla, y dejó 201 muertos y 229 desaparecidos.
También lea: «No es madera, es carne humana»: el trabajo de los primeros voluntarios que recuperaron los cuerpos de los muertos en la tragedia del Volcán de Fuego de Guatemala
Esa ha sido la erupción mal potente y letal de los últimos tiempos y que hizo reaccionar a las autoridades que tienen claro que no es posible predecir cuándo un coloso entrará en actividad.
El estudio fue hecho con el apoyo de la Agencia de Cooperación Internacional de Chile, Observatorio Volcanológico de los Andes del Sur, Programa de Asistencia por Desastres de Volcanes y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional.
Ranquin
- Santa María/Santiaguito, Quetzaltenango
- Fuego, Chimaltenango, Sacatepéquez y Escuintla
- Pacaya, Escuintla
Alta
- Tacaná, San Marcos
- Cerro Quemado, Quetzaltenango
- Acatenango, Acatenango, Chimaltenango
- Atitlán, Sololá
- Agua, Sacatepéquez
Media
- Tolimán, Sololá
- Tecuamburro, Santa Rosa
- Tahual, Jalapa
- Ixtepeque, Jutiapa
Contenido relacionado
> Falta de lluvia impacta nivel de agua baja unos tres metros
> Guía de excursiones para conocer Guatemala en fines de semana
> Preocupado, ambientalista y sin lujos: El nuevo perfil de turista que busca atraer Guatemala