El 17 de abril de 2003, tomar suplementos de ácido fólico antes y durante las primeras etapas del embarazo no sólo podría ayudar a prevenir los defectos del tubo neural en los bebés, sino que también podría reducir el riesgo de síndrome de Down. Un nuevo estudio sugiere que podría haber una relación entre el síndrome de Down y los defectos del tubo neural, y que los suplementos de ácido fólico podrían ser una forma eficaz de prevenir ambos.
Los defectos del tubo neural están causados por el desarrollo anormal del cerebro y la médula espinal durante las primeras etapas del embarazo. Los defectos del tubo neural más graves pueden causar un deterioro mental y físico devastador. Numerosos estudios han demostrado que tomar suplementos de ácido fólico antes y durante el embarazo puede reducir significativamente el riesgo de defectos del tubo neural.
El síndrome de Down es uno de los defectos congénitos más comunes, y los niños que nacen con esta afección suelen presentar algún grado de retraso mental, así como rasgos físicos distintivos. Aunque no se conocen bien los riesgos de desarrollar el síndrome de Down, se sabe que la edad de la madre y los antecedentes familiares aumentan el riesgo.
Los investigadores afirman que estudios anteriores han demostrado que las madres de niños con síndrome de Down y defectos del tubo neural tienden a compartir problemas para procesar el ácido fólico, lo que les llevó a comprobar si ambos defectos se daban con más frecuencia en la misma familia que en otras.
El estudio, que aparece en el número del 19 de abril de la revista The Lancet, comparó el número de niños nacidos con cualquiera de los dos defectos entre los embarazos con riesgo de padecer defectos del tubo neural o síndrome de Down debido a un historial familiar de los mismos.
Descubrieron que el número de embarazos (11) afectados por el síndrome de Down era más de cinco veces superior entre los 1.492 embarazos de familias israelíes con riesgo de defectos del tubo neural en comparación con otras mujeres de la misma edad. Un aumento similar en el número de defectos del tubo neural se encontró entre las familias ucranianas con riesgo de síndrome de Down, con una incidencia siete veces superior a la esperada del defecto entre los 1.847 embarazos estudiados.
Los investigadores afirman que este estudio proporciona la primera prueba de que el síndrome de Down y los defectos del tubo neural pueden compartir algunas similitudes en cuanto a cómo se desarrollan y quién está en riesgo.