Concentración atmosférica de difluorometano en varias latitudes desde el año 2009.
El difluorometano es una molécula utilizada como refrigerante que tiene un excelente rendimiento de transferencia de calor y de caída de presión, tanto en condensación como en vaporización. Tiene un potencial de calentamiento global (GWP) a 100 años de 675 veces el del dióxido de carbono, y una vida atmosférica de casi 5 años. Está clasificado como A2L (ligeramente inflamable) por la ASHRAE, y tiene un potencial de agotamiento de la capa de ozono (ODP) nulo. Por lo tanto, el difluorometano es una opción de riesgo relativamente bajo entre los refrigerantes HFC, la mayoría de los cuales tienen un mayor PCA y una mayor persistencia cuando se producen fugas.
El difluorometano en una mezcla zeotrópica (50/50% en masa) con pentafluoroetano (R-125) se conoce como R-410A, un sustituto común de varios clorofluorocarbonos (también conocido como Freón) en los nuevos sistemas de refrigeración, especialmente para el aire acondicionado. La mezcla zeotrópica de difluorometano con pentafluoroetano (R-125) y tetrafluoroetano (R-134a) se conoce como R-407A a R-407F dependiendo de la composición. Asimismo, el R-504 es la mezcla azeotrópica (48,2/51,8 % en masa) con clorotrifluorometano (R13).
El difluorometano se utiliza actualmente en acondicionadores de aire residenciales y comerciales en Japón, China e India como sustituto del R-410A. Para reducir el riesgo residual asociado a su leve inflamabilidad, esta molécula debe aplicarse en equipos de transferencia de calor con baja carga de refrigerante, como los intercambiadores de calor de placas soldadas (BPHE), o los intercambiadores de calor de carcasa y tubos y los intercambiadores de calor de tubos y placas con tubos de pequeño diámetro.Muchas aplicaciones confirmaron que el difluorometano presenta coeficientes de transferencia de calor superiores a los del R-410A en las mismas condiciones de funcionamiento, pero también mayores caídas de presión por fricción.