Cómo evitar el drama a los 20 años

Cuando tienes 20 años, sé que el drama es lo último que quieres que ocurra.

Sé que tus compromisos universitarios, las prácticas o la obsesión por conseguir el trabajo perfecto ya son lo suficientemente complicados, y no tienes tiempo para dramas innecesarios.

Pero, puede ser difícil evitarlo cuando estás rodeado de amigos o compañeros de trabajo a los que les encanta cotillear.

Así que, aquí hay 20 cosas sencillas que puedes hacer para que tu vida esté libre de drama:

Deja de revisar tu feed de noticias de las redes sociales constantemente.

Ya sea tu Instagram, Facebook o Snapchat, muchas plataformas de medios sociales sólo dan cabida a tus celos y a tu obsesión por la vida de los demás.

No te involucres con los chismes.

Recuerda siempre que los que chismorrean contigo chismorrearán sobre ti. No te acerques demasiado a este tipo de personas.

Métete en tus asuntos.

Si quieres involucrarte en los problemas de la gente, asegúrate de que es sólo porque quieres ayudarles sinceramente.

Deja de fingir.

Fingir tus propias actitudes sólo te cansará emocionalmente. Si no puedes controlar tu temperamento en una situación crítica, sal de la habitación y cálmate antes de hablar con los demás.

Di «sí» o «no» y dilo de verdad.

Estés de acuerdo o no, te guste o no, lo quieras o no. Di la verdad sin que haya mensajes ocultos confusos detrás.

Habla de las cosas que amenazan tu bienestar.

Callar algo que realmente te molesta sólo complicará las cosas. Ponte en primer lugar, y encuentra una buena manera de comunicar las cosas con otras personas para que te entiendan.

Baja tus expectativas hacia todo.

Esto te ahorrará el dolor de sentirte decepcionado y con el corazón roto.

Deja de pensar y preocuparte demasiado.

No tienes que resolverlo todo en una noche. Relájate y recuerda que todo lleva su tiempo.

No te tomes las opiniones de la gente sobre ti de forma demasiado personal.

Porque lo que realmente importa es tu propia opinión, y nadie te conoce más que tú mismo.

Rodéate de gente fácil de llevar.

La mayoría de las veces, no se preocupan realmente por la apariencia y las cosas artificiales de los demás porque sólo quieren hacer amigos. (Y la mayoría de ellos suelen ser sinceros).

Cree en tu intuición.

Aunque sea un tópico, tu instinto suele tener razón. No vayas en contra de él.

Mantente centrado en tus sueños.

Llena tus ratos libres con cosas positivas, y céntrate en tus objetivos hasta que no tengas tiempo de involucrarte en dramas innecesarios.

Aléjate de las relaciones tóxicas.

Si sientes que tus amigos o tu pareja abusan emocionalmente de ti, no te lo pienses dos veces antes de dejar la relación. Simplemente hazlo inmediatamente.

Deja de perseguir la atención de la gente.

Tienes que darte cuenta de que la atención y el amor deberían ser sin esfuerzo, no un gran obstáculo para conseguirlos.

Intenta sentirte cómodo estando solo.

No seas demasiado pegajoso porque ser confiable es a veces la principal fuente de drama.

Practica la atención plena y la conciencia corporal.

El drama puede ocurrir porque eres demasiado torpe, y la torpeza atrae los problemas. Intenta estar siempre presente en todo lo que haces.

Habla menos, escucha más.

Deja de dominar la conversación e intenta comprender a los demás.

Practicando la escucha activa, evitarás debates innecesarios con los demás.

No te avergüences de pedir perdón.

Ser el que pide perdón no significa que seas débil; significa que eres más maduro.

Vive de forma saludable.

Intenta hacer ejercicio con regularidad y evita la comida basura. Recuerda que los problemas de salud también pueden ser dramáticos.

Piensa positivamente en el universo.

La mayoría de las veces, el universo nos da exactamente las cosas en las que pensamos.

Así que, cuando pienses positivamente, atraerás cosas positivas, y viceversa.

Al final del día, el drama sólo ocurrirá si tú lo creas. Yo he probado casi todas las cosas de la lista, y mi vida ha ido bien y en paz (aunque a veces parezca aburrida).

Recuerda siempre que eres tu propio dueño de la vida, y si puedes controlarte a ti mismo, también puedes controlar el drama.

Este artículo fue escrito originalmente por Rayi Noormega para Unwritten.

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