Imaginando a tus alumnos actuales, probablemente ya tengas claro quiénes son tus alumnos visuales. Son las almas imaginativas que recuerdan más fácilmente lo que ven (en lugar de lo que oyen) y se sienten motivados por los rompecabezas, la escritura, las manualidades y el movimiento. Incorporar técnicas que se dirijan directamente a estos alumnos ayuda a equilibrar el campo de juego, pero ¿por dónde empezar? Utilice estos ocho consejos fundamentales para ayudar a sus alumnos visuales a estudiar mejor.
Escriba el nuevo vocabulario
¡No tiene que ser un artista para apoyar a sus alumnos visuales! El simple hecho de adquirir el hábito de escribir las palabras nuevas y añadir algunas pistas contextuales rápidas (por ejemplo, poner la parte de la oración entre paréntesis o subrayar la sílaba acentuada) será de gran ayuda.
Utilizar la pizarra blanca de forma eficiente
Designar funciones a ciertas áreas de la pizarra y utilizar colores para organizar la información durante la lección. (¡Aquí hay más consejos sobre el buen uso de la pizarra!)
Utilizar cuadros y gráficos
Estos atraen a los alumnos visuales y les permiten recordar más fácilmente la información, organizar los conceptos y articular sus pensamientos. Pruebe:
- Diagramas de Venn (que representan comparaciones y contrastes)
- Líneas de tiempo (para representar visualmente los tiempos, o una serie de eventos)
- Triangios invertidos (que progresan de temas amplios a otros más específicos)
- Planificadores de historias o ensayos (que guían a los estudiantes a través de los pasos necesarios para completar estas tareas), y
- Cuadros para enumerar familias de palabras (añadir columnas para verbo, adjetivo, adverbio, sustantivo y rellenar todo lo que corresponda a medida que surjan las palabras: e.g., engage, engaging, engagingly, engagement)
Añade símbolos y movimiento a las tarjetas de vocabulario
Las tarjetas del alfabeto que habrás visto en tu propia escuela primaria se adaptan a esta técnica (recuerda que la «A» está siendo pisada por las hormigas; la «C» es la cola de un gato enroscada en la forma de la letra…) Cuando se enseña vocabulario con tarjetas de vocabulario, las pistas visuales ayudan mucho a los alumnos. Por ejemplo, «yummy», puede dibujarse en los remolinos de un cono de helado, y sus estudiantes enseñarán una acción fácil de recordar asociada a la idea de lo delicioso (como lamerse los labios o frotarse la barriga).
Juega con las flashcards.
Unos cuantos juegos clásicos implican flashcards (piense en las cabezas de los famosos o en la memoria). Hacer que los alumnos se levanten y se muevan, o que interactúen con estas tarjetas en parejas o en pequeños grupos, favorece la preferencia de sus alumnos visuales por tocar e interactuar con los materiales educativos.
Experimente con objetos reales
Estos objetos de la vida real hacen que los nuevos conceptos sean memorizables (piense en las frutas y las verduras) y proporcionan una pista práctica y visual a la que recurrir en la vida real (piense en mapas, folletos, tarjetas de visita, anuncios, envases, menús y fotos). Los alumnos visuales apreciarán poder ver y tocar estos elementos, y encontrarán pistas en ellos para retener el lenguaje.
Utilice presentaciones de diapositivas y vídeos
Los podcasts pueden funcionar bien para otros tipos de alumnos, pero los alumnos visuales necesitan el aporte adicional de la vista. ¿Eres nuevo en esto de los vídeos en clase? Comience con estas ideas.
Anímelos a sentarse delante
Los alumnos visuales asimilan una gran cantidad de información a partir de las expresiones faciales y el lenguaje corporal. Aprovéchalo en su beneficio (y en el tuyo) recurriendo al humor, la exageración y los gestos a la hora de enseñar.
Como educador, entender cómo prefieren aprender tus alumnos es un elemento esencial para ayudarles en su camino hacia la fluidez. Con estos consejos, tus alumnos visuales se sentirán atendidos y tus otros alumnos también se divertirán.