Adaptaciones y adaptabilidad
Los humanos tenemos plasticidad biológica, o una capacidad de adaptación biológica a nuestro entorno. Una adaptación es cualquier variación que puede aumentar la aptitud biológica en un entorno específico; más sencillamente es la interacción exitosa de una población con su entorno. Las adaptaciones pueden ser de naturaleza biológica o cultural. Las adaptaciones biológicas varían en su duración, desde unos pocos segundos para un reflejo hasta toda una vida para la aclimatación del desarrollo o la genética. Los cambios biológicos que se producen durante la vida de un individuo también se denominan adaptaciones funcionales. El tipo de adaptación que se activa suele depender de la gravedad y la duración de los factores de estrés en el entorno. Un factor estresante es cualquier cosa que altere la homeostasis, que es una «condición de equilibrio, o estabilidad, dentro de un sistema biológico…» (Jurmain et al 2013: 322). Los factores de estrés pueden ser abióticos, por ejemplo, el clima o la altitud, bióticos, por ejemplo, las enfermedades, o sociales, por ejemplo, la guerra y el estrés psicológico. Las adaptaciones culturales pueden producirse en cualquier momento y pueden ser tan sencillas como ponerse un abrigo cuando hace frío o tan complicadas como diseñar, construir e instalar un sistema de calefacción en un edificio.
Tipos de adaptación biológica
Aclimatación
Esta forma de adaptación puede tardar desde momentos hasta semanas en producirse y es reversible en el transcurso de la vida de un individuo sin importar si se produce cuando se es niño o adulto.
La aclimatación a corto plazo puede producirse en cuestión de segundos tras la exposición a un estresor. Este tipo de respuesta revierte rápidamente cuando el estresor ya no está presente. Imagine que sale de un edificio con aire acondicionado o de un coche en un día de 90 grados. Su cuerpo comenzará a transpirar rápidamente en un intento de enfriar su temperatura corporal y volver a la homeostasis. Cuando la temperatura desciende, también lo hace la transpiración. El bronceado es otra respuesta a corto plazo, en este caso a una mayor exposición a la radiación UV, especialmente durante los meses de verano, que puede producirse en cuestión de horas. El bronceado se pierde generalmente durante el invierno, cuando la radiación UV disminuye.
Aclimatación del desarrollo
La aclimatación del desarrollo se produce durante el crecimiento y el desarrollo de un individuo. También se llama aclimatación ontológica o ajuste del desarrollo. Hay que tener en cuenta que no pueden tener lugar una vez que el individuo ha crecido completamente. Suele haber una «ventana temporal mágica» en la que puede producirse la aclimatación. Esta adaptación puede tardar de meses a años en adquirirse.
Un ejemplo famoso de esto es el de los que han crecido a gran altura frente a los que se han trasladado a gran altura como adultos. Los que nacieron a gran altitud tienden a desarrollar una mayor capacidad pulmonar que los que no nacieron a gran altitud, pero se trasladaron allí más tarde. Sin embargo, el ajuste del desarrollo también se produce en respuesta a los factores de estrés cultural. La deformación corporal intencionada se ha documentado a lo largo de la historia de la humanidad. La antigua élite maya utilizaba tablas de cuna para remodelar el cráneo. En China, el vendaje de los pies, que ahora es una práctica ilegal, se consideraba una marca de belleza y permitía a las chicas encontrar un cónyuge rico.
Genética
Las adaptaciones genéticas pueden producirse cuando un factor de estrés es constante y dura muchas generaciones (O’Neil 1998-2013). La presencia del alelo falciforme en algunas poblaciones humanas es un ejemplo. Hay que tener en cuenta que las adaptaciones genéticas son específicas del entorno. En otras palabras, mientras que un gen particular puede ser ventajoso para tener en un entorno (AKA una adaptación genética), puede ser perjudicial para tener en otro entorno.
Adaptaciones genéticas humanas y variación humana
Color de la piel
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Tamaño y forma del cuerpo
Mujeres inuit
Hay dos reglas ecológicas, conocidas como la regla de Bergmann y la regla de Allen, que explican la variación del tamaño y la forma de los cuerpos y las extremidades utilizando la latitud y la temperatura.
Regla de Bergmann: Los animales de sangre caliente tienden a tener un tamaño corporal creciente con el aumento de la latitud (hacia los polos) y la disminución de las temperaturas medias.
Regla de Allen: Un corolario de la regla de Bergmann que se aplica a los apéndices. Los animales de sangre caliente tienden a tener extremidades más cortas con el aumento de la latitud y la disminución de las temperaturas medias.
Cuando los organismos son más compactos, tienden a conservar el calor (debido a una alta relación masa:superficie). Cuando los organismos son más lineales, tienden a perder más calor (debido a una baja relación masa/superficie).
Esto se ha aplicado a los humanos. La idea es que las poblaciones hacia el polo tienden a ser más bajas y a tener extremidades más cortas que las personas del ecuador.
Por ejemplo, el pueblo inuit de Canadá (imagen superior) tiende a ser más bajo que el pueblo masai de Kenia (imagen inferior):
Jóvenes maasai
Raza
Técnicamente, una raza es una subespecie biológicamente clasificable. Por lo tanto, cuando nos preguntamos: «¿Existen las razas humanas?», lo que realmente estamos preguntando es: «¿Existen subespecies biológicamente clasificables en los seres humanos?».
Aquí está la declaración de la Asociación Antropológica Americana sobre la raza y la declaración de la Asociación Americana de Antropólogos Físicos sobre la raza.
¿Qué dicen?
Básicamente:
- la raza es una categorización arbitraria, las razas no son grupos biológicamente distintos (en otras palabras, la raza es una construcción cultural, no biológica)
- mientras que los grupos de personas que han vivido juntos durante mucho tiempo pueden tener algunos alelos en común (por ejemplo, los que codifican el color de la piel o del pelo), hay más variación genética dentro de las razas que entre ellas
- el concepto de raza ha sido históricamente una herramienta que algunas personas utilizan para subyugar a otras
Explora más el concepto de raza, su historia y la variación humana.
Larsen CS. Nuestros orígenes: descubriendo la antropología física. Nueva York (NY): W.W Norton& Company, Inc.; 2008. 430 p.