El principal hallazgo de imagen que ilustra este caso es la presencia de bronquiectasias en un paciente adulto con infecciones respiratorias recurrentes. Aunque está mal caracterizada en la radiografía de tórax, las imágenes axiales de TC demuestran claramente una dilatación anormal de los bronquios segmentarios y subsegmentarios, y una extensa impactación bronquial mucoide.
El término «bronquiectasia» se utiliza para describir la dilatación anormal de los bronquios y, por definición, se reserva para describir un proceso irreversible. Las bronquiectasias pueden ser la causa de infecciones recurrentes o la consecuencia de las mismas. La identificación de las bronquiectasias es esencial, y tiene implicaciones para el manejo de la enfermedad del paciente.
La relación bronco:arteriolar se utiliza como herramienta objetiva para definir la presencia de bronquios anormalmente dilatados. Dado que las arterias pulmonares y los bronquios se desplazan desde el hilio hasta la periferia del pulmón a lo largo de la misma vaina de tejido conectivo broncovascular (intersticio axial), el proceso de ramificación tiene lugar en un momento bastante similar y el calibre tanto de la arteria como del bronquio es similar (relación 1:1). Las bronquiectasias se identifican fácilmente en las imágenes de TC axial por la comparación de los diámetros bronquial y arterial, en cuyo caso el calibre bronquial es mayor que el de la arteria que lo acompaña al mismo nivel, debido a la falta del estrechamiento normal de las vías respiratorias a lo largo del proceso de ramificación (relación bronco:arterial anormal) (Figura 3).
Figura 3. Imagen axial de TC de alta resolución del pulmón que demuestra una relación broncoalveolar anormal. El calibre de los bronquios subsegmentarios es mayor, en comparación con la arteria subsegmentaria que los acompaña, lo que da lugar al signo del anillo de sello (círculo discontinuo).
El signo radiológico clásico que resulta de esta anomalía es el signo del anillo de sello (figura 3, círculo discontinuo), que conduce al diagnóstico de bronquiectasia. Otro hallazgo de imagen útil para la identificación de las bronquiectasias es la visualización de las vías aéreas en la periferia del pulmón en las imágenes de TC, donde normalmente no se identifican las vías aéreas.
Morfológicamente, las bronquiectasias pueden clasificarse por el aspecto de imagen en cilíndricas, quísticas, varicosas y de tracción. Esta clasificación no tiene un impacto importante en el diagnóstico diferencial, excepto para la identificación de las bronquiectasias de tracción, que indican la presencia de fibrosis intersticial asociada. La morfología de las bronquiectasias no es específica de una entidad, y comúnmente coexisten.
Las bronquiectasias pueden dividirse en bronquiectasias asociadas a fibrosis quística (FQ) y bronquiectasias no asociadas a FQ. En los adultos, las bronquiectasias no asociadas a la FQ son mucho más frecuentes. Entre las numerosas afecciones que pueden provocar bronquiectasias, las causas idiopáticas, postinfecciosas y de enfermedades del tejido conectivo suelen estar implicadas. Los casos denominados «idiopáticos» pueden, de hecho, incluir un número importante de trastornos con desregulación inmunitaria en una investigación más profunda.
La distribución anatómica de los bronquios anormales en los pulmones puede ser útil para determinar la etiología. Entidades, como la FQ y la sarcoidosis, suelen presentar bronquiectasias con predominio del lóbulo superior; la infección por micobacterias no tuberculosas suele afectar al lóbulo medio derecho y a la língula; y entidades como la disquinesia ciliar primaria, la aspiración crónica, las bronquiectasias asociadas a la enfermedad inflamatoria intestinal y la enfermedad pulmonar intersticial (como la neumonía intersticial habitual y la neumonía intersticial inespecífica) suelen estar asociadas a las bronquiectasias con predominio del lóbulo inferior. Pueden observarse bronquiectasias difusas sin predominio lobar en casos de FQ y aspergilosis broncopulmonar alérgica.
Las entidades menos frecuentes, como los síndromes de Williams-Campbell y Mounier-Kuhn, tienen un predominio central de las bronquiectasias. El primero afecta característicamente a los bronquios de cuarta a sexta generación, pero prescinde de la tráquea y los bronquios principales; el síndrome de Mounier-Kuhn, en cambio, se caracteriza por un aumento del diámetro de la tráquea y los bronquios principales además de las bronquiectasias periféricas, y también se conoce como «traqueobroncomegalia.»
La bronquiectasia focal puede ser el resultado de cuerpos extraños en las vías respiratorias, tumores endobronquiales, broncolitos y atresia congénita de las vías respiratorias.